FORMULA PRECIOSA "BASE". Coloides de cobre, plata, oro, zinc,magnesio y molibdeno. 30 PPM de cada coloide. Envase de 250 ml (para 20-25 días)
50,00 €
Fresco.
Mezcla artesana de coloide de cobre, plata, zinc y magnesio.
Tomar mínimo 3 veces al dia. Ideal 5.
Una dosis de 4ml por toma. (Incluye pipeta dosificadora)
Los oligoelementos son elementos minerales presentes en los organismos vivos en muy pequeña cantidad que juegan un papel biológico esencial. Su utilización terapéutica ofrece un método inocuo de tratamiento de las enfermedades funcionales.
El término “oligoelementos” se emplea en los países latinos para designar a los elementos químicos -normalmente metales- presentes en la materia viva en cantidades pequeñas (oligos significa poco en griego). En los países anglosajones se les denomina “trace-elements”. El organismo es incapaz de sintetizarlos por lo que debe tomarlos del exterior.
![]() | Pasteur al final de su existencia, mostrando la gran humildad y seriedad científica que le caracterizaba, le escribe a Claude Bernard: "Querido Bernard, creo que tiene Usted razón, el terreno lo es todo, el microbio no es nada" |
Historia de la oligoterapia
La importancia biológica de los oligoelementos comenzó a ser conocida tras los trabajos de Gabriel Bertrand, 1894, quien descubrió que todo organismo vivo los necesita en cantidades infinitesimales, para constituir las enzimas, necesarios para el crecimiento y la reproducción.
Sin embargo, fue el doctor Jacques Ménetrier quien, en 1932, basándose en los trabajos de Bertrand, verifica experimental, clínica y biológicamente el papel que juegan los oligoelementos en la salud y elabora las bases de la Medicina Funcional.
Desde entonces numerosos investigadores y médicos han aportado sus experiencias, pero es de destacar la excepcional labor que el doctor Henri Picard ha realizado en el uso experimental de los Oligoelementos, en diferentes campos de la medicina, especialmente en el de la reumatología.
Claude Bernard dio un gran impulso a la fisiología experimental moderna y puso el acento en los problemas de inmunidad, al afirmar que las enfermedades infecciosas no podían encontrar completa explicación atendiendo sólo al organismo, sino que era necesario tener en cuenta el terreno individual sobre el cual el microbio crecía.